jueves, 26 de noviembre de 2009

DÍA INTERNACIONAL DE LA NO VIOLENCIA CONTRA LA MUJER


Felicitamos a esa luchadora infatigable que es Stella Maris Casarino, a quien también saludamos en el día de su cumpleaños. Gracias por la conferencia de ayer. Gracias a Marita Schmit por la nota.
Hugo Turrini


Jóvenes radicales de La Boca organizaron
un debate sobre la violencia contra la mujer

Ayer, 25 de noviembre, se conmemoró el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y con él, hasta el 10 de diciembre -Día Internacional de los Derechos Humanos-, comenzó una quincena que recuerda que la violencia contra la mujer en razón de su género es una violación de los derechos humanos.

En nuestro país, en la ciudad de Buenos Aires, el tema no pasó desapercibido, ya que se realizaron conferencias y charlas en distintos ámbitos. Algo así como semillitas que ya en tierra, pronto germinarán, es más, algunas ya lo hicieron. Lo más llamativo tal vez no haya sido la cantidad de gente que asistió, a la convocatoria encabezada por Jorge Kehiayan, de Jóvenes radicales del barrio porteño de La Boca, sino la participación e interés de jóvenes y de hombres,

Los veinteañeros organizaron una charla-debate “la violencia contra la mujer nos lastima a todos”, en la que expusieron , Stella Maris Casarino, presidente del FOPEMURA, Silvia Collin, politóloga, y Marisa Castiglione, presidente de la Asociación Civil “El Trapito”. Con claridad y una gran sensibilidad éstas tres mujeres pusieron sobre la mesa, sin eufemismos, una realidad que golpea –valga la expresión- a mujeres del mundo, cualquiera sea su condición económica, social, intelectual. Tampoco respeta edades, color de piel ni estatura.

Casarino rompió el silencio, contando una vivencia personal, refirió que una amiga le regaló un libro sobre la mujer golpeada, escrito por una investigadora del Conicet. “Mi amiga –continuó- le prestó a su hermana –una mujer maltratada-y su hermana se lo devolvió forrado…Así como lo ven, forrado”… “Esto quiere decir, cuánto sufre una mujer golpeada” –enfatizó- que no quiere por vergüenza, por su propio dolor, por miedo, mostrar que está aprendiendo a cuidarse de ser una víctima. La titular del Foro Permanente de Mujeres Radicales, habló luego del tiempo que ya se lleva trabajando en este verdadero drama, señalando que sin ir más lejos en los años 90, cuando tratábamos la “violencia marital” que así se llamaba, las respuestas del público masculino, y de profesionales y funcionarios, eran, por ejemplo, -“son cosas de feministas”, “mentiras o exageraciones propias de las mujeres”, “calumnias de lesbianas enemigas de los hombres”, entre otros argumentos.

Stella Maris Casarino reclamó la confección de una base de datos nacional y unificada, sobre la violencia contra las mujeres.

La violencia no es un asunto privado, es una cuestión pública. La violencia contra la mujer es un delito que debe ser sancionado. El silencio y la indiferencia son sus aliados.

La violencia contra las mujeres es un problema social de grandes dimensiones. Producto de relaciones de poder históricamente desiguales entre varones y mujeres, que atraviesa como se dijo, todos los niveles económicos, culturales y educativos. De este aspecto, se encargó la politóloga Silvia Collin, quien aclaró que “esa violencia no la sufren sólo en la familia, sino también en la escuela, el trabajo, las calles, las prisiones, y muchas veces es tolerada por el Estado”, y destacó la “nueva” cara de la violencia, la que se da en el noviazgo.

Marisa Castiglione centro su exposición en el rol del poder. " La violencia contra la mujer tiene que ver con el poder."
Destacó el trabajo que se realiza en España para hacer frente a este verdadero drama social, y sobre todo la calidad de los avisos publicitarios, -propagandas-

El problema de la violencia contra la mujer es a nivel mundial y se ha convertido en una "pandemia" ante la que los gobiernos deben dar respuesta.
Como no dar respuesta, a una realidad, que se traduce en la muerte de una mujer cada tres días, víctima del maltrato.

Mujeres víctimas de violencia:
Pueden recurrir a :

Consejo Nac. De la Mujer: TE 4345-7384/86
Dirección Gral de la Mujer: 0800-666-8537
Asociación Argentina de Prevención de la Violencia Familiar: (ONG) TE.4953-1268

MARITA SCHMIT

miércoles, 25 de noviembre de 2009

POR QUÉ LUCHAMOS








Cuantas veces nos hemos hecho ésta pregunta ante tanta adversidad,¿ será verdad que aquellas palabras de Don Raúl se hacen realidad ante la locura cotidiana de vivir en éste bendito país? Los argentinos estamos, no cansados, hartos de arar en el mar, hartos de ver cada día escurrirse por entre nuestras manos los anhelos de años de incansable trabajo.
Nos han querido vender quimeras , nos han querido engañar de una manera tan perversa que hasta el más vil mentiroso sentiría vergûenza ante tamaña mentira, han sembrado la violencia en la sociedad, han sembrado la locura y la muerte, solo para someter cada vez mas a la gente, porque de algo estoy seguro, el peronismo es una fábrica de pobres, porque de ésa manera sostienen su poder.
Ese decir falaz que tienen los que hoy nos gobiernan, se va a terminar, la politica sin ética, sin moral, es basura, pero permitanme agregar, que mas basura es aquel que se vale de la política para su propio provecho, ese es el que no tiene ética ni moral.
Las políticas públicas son sin dudas para servir al pueblo y no para servirse de ellas, entonces cuando comprendamos ésto seguramente estaremos rindiendo homenaje a aquello por que tanto militamos y es
entonces, cuando algun distraído nos pregunte por que luchamos, porque marchamos juntos, sin vacilar le diremos, luchamos por la única causa que conocemos, la de reparar el tremendo daño que le han hecho a nuestro pueblo, NUESTRA LUCHA ES POR LA CAUSA DE LOS DESPOSEIDOS.
No vamos a dar un paso atrás, ni para tomar impulso, porque nuestro objetivo es uno solo, terminar con la pobreza, el hambre, la enfermedad para devolverle a nuestra patria la felicidad que le han robado.
Adelante Radicales.

PABLO BERTOLÓN
Dirigente de Orgullo Radical Morón

SOLIDARIDAD CON LAS CIUDADES AFECTADAS POR LAS INUNDACIONES

El Comité Nacional de la Juventud Radical se solidariza con las comunidades afectadas por las crecidas producto de las precipitaciones de los últimos días. En ése sentido convocamos a los correligionarios de pueblos no afectados, pero cercanos a las zonas inundadas, a sumarse a los trabajos que desde cada uno de los comités se vienen realizando




Los pronósticos del tiempo indican que la situación podría agravarse, por lo cual desde el Comité Nacional de la JR invitamos a acercar donaciones a la sede Nacional de Alsina 1786, Capital Federal, a los efectos de poder colaborar con los compatriotas afectados.

Acciones de la Juventud Radical en las comunidades afectadas:

Concordia:
La JR departamental, junto con la Vicepresidenta 2º del Comité Nacional, Lorena Aguilar, oriunda de esa localidad Entrerriana organizan en el Comité Local una colecta de ropa, colchas, colchones, chapas, alimentos, agua, medicamentos etc. En ese sentido, los jóvenes radicales de la localidad están organizando un grupo de voluntarios para socorrer a las familias afectadas por la crecida del río.
Donaciones:
Comité Departamental UCR Concordia. Pellegri 535, Concordia, Entre Ríos. CP: 3200

Chaco:
El Comité Provincia de la JR Chaqueña convoca a toda la militancia provincial a organizarse en grupos de voluntarios, además de recibir donaciones en la Casa Partidaria. Reciben alimentos no perecederos, colchones, agua, medicamentos, etc.
Donaciones:
Comité Provincia UCR Chaco, López y Planes 358, Resistencia, Chaco. CP 3500
Casa de Convergencia Social, José María Paz 333, Resistencia, Chaco. CP 3500

Ciudad de Buenos Aires:
Además se recolectarán donaciones para ser enviadas en dos puntos de la Ciudad de Buenos Aires.
Comité Nacional de la Juventud Radical, Alsina 1786 5to Piso, CABA, CP 1088
Comité 26 de Julio, José Bonifacio 2759, Barrio de Flores, CABA, CP 1406

Juventud Radical Comité Nacional

ALFONSIN PAZ


Un análisis de la Juventud Radical de Rojas, especial para RojasCiudad.


A 25 años de la consulta popular con la que Raúl Alfonsín buscó el aval de los ciudadanos al acuerdo de paz con Chile, por el diferendo sobre el Canal de Beagle y las islas Picton, Nueva y Lennox.
En el año 1984 el presidente Alfonsín convocó a la ciudadanía para definir si aceptaba o no el acuerdo alcanzado con Chile para terminar con el conflicto del Canal de Beagle. Dando muestras de su espíritu democrático y pacífico dejó en manos de la sociedad ésta trascendental decisión.
La original medida de consulta, que fue utilizada por primera vez en nuestro país, despertó objeciones de varios sectores (políticos, militares). Alfonsín respaldando el plebiscito decía: “queremos que los argentinos, todos los argentinos, participen tomando posición acerca de si conviene o no dar solución rápida y pacífica a un problema que ha constituido desde hace un siglo un elemento de tensión con la República de Chile . La solución al diferendo del Beagle no sólo constituiría el final de un antiguo litigio sino además, y sobre todo, un factor esencial para construir un futuro que se nos avecina con rapidez”.
Fue así que se llegó al 25 de noviembre de 1984, donde el “Sí” obtuvo el 81,13% de los votos frente al 17,24% del “No” y un 1,63% en blanco, con una participación del electorado del 70,17%.
Un cuarto de siglo después, vemos en Esta medida del Dr. Alfonsín una muestra más de la esencia de un hombre que bregó siempre por la DEMOCRACIA, el CONSENSO y la PAZ.

lunes, 23 de noviembre de 2009

EL TATARABUELO DEL BLOG


"Boina Blanca" de 1985. Lado B.Presionar sobre la imagen para agrandar.


Soñaba con tener aquel invento patentado por Edison y que utilizaban en la escuela primaria: el mimeógrafo. Era un sueño humilde. La utopía era tener una impresión semejante a la de los periódicos!!


En 1983, coincidentemente con la campaña, apareció el boletín "Boina Blanca". No tenía fecha cierta de aparición. Estoy realizando un trabajo "arqueológico" en la casa de mis padres para ver si puedo conseguir más de esos números originales. Verdaderas reliquias de un militante de quince años que, justamente, estaba aprendiendo mecanografía en el tercer año del Comercial de Ballester. Una vieja "Remington" dada de baja por una oficina y reacondicionada por un vecino especialista en restaurar máquinas de escribir, fue el instrumento. Era "gigante", con una tapa color verdoso "martillado".


Cara y contracara. Una hoja oficio doble faz. En eso consistía "Boina Blanca". La tirada?? Un puñado de ejemplares fotocopiados. Noticias de campaña (y del primer año de gestión), mezclado con la historia de los grandes personajes radicales. El centro: Raúl Alfonsín. Un puñado de ejemplares para unos pocos amigos (correligionarios y no).


Paralelamente, participando en el Centro de Estudiantes. Identificado como radical, pero con compañeros peronistas, comunistas, independientes, etc , en una "Lista " llamada "Frente Amplio Estudiantil". Había otras listas: la Blanca, la Verde, etc. No había "política partidaria" en mi escuela.


En ese momento de ebullición democrática y primavera adolescente: este pequeño testimonio. En el ejemplar que muestro (aparecido en enero de 1985) y uno de los últimos, se evoca a Arturo Illia a los dos años de su partida física. Lo comparto.


"Boina Blanca" fue el humilde tatarabuelo de la "Antorcha Radical". Aquel puñado de lectores se transformó en más de 11.000 entradas a un blog en pocos meses.


Aprovechemos estas herramientas tan eficaces. Soy un agradecido de esta tecnología, recordando con una sonrisa aquellos épicos boletines juveniles. Mi abrazo.


Hugo Turrini

sábado, 21 de noviembre de 2009

FÉLIX LUNA, UN MILITANTE


NOS SUMAMOS A ESTE HOMENAJE DEL DR DIEGO BAROVERO. AQUÍ VA SU ESCRITO. GRACIAS DIEGO!
HUGO TURRINI

Era 1983. Despuntaba el fervor democrático previo a la campaña electoral que pondría fin a una larga y sangrienta dictadura. Recorría junto a mi padre la Feria del Libro, que por entonces se realizaba en el Centro Municipal de Exposiciones de la avenida Figueroa Alcorta, cuyos pasillos hedían a choripan. Convocado por el mensaje renovador y carismático del emergente Raúl Alfonsín me identifiqué tempranamente con el radicalismo, pero necesitaba profundizar sobre las raíces, principios e historia del casi centenario partido que habían fundado el mítico Leandro Alem y el misterioso Hipólito Yrigoyen. Mi padre me regaló entonces la biografía de este último escrita por Félix Luna muchos años antes, pero que seguía reeditándose con gran éxito.
Al rato y casi por casualidad pude identificar la menuda figura del prestigioso historiador autor del libro que me acababan de obsequiar que corría rauda por un pasillo con rumbo a alguna presentación o mesa redonda.
Se me ocurrió pronunciar su nombre con la intención de obtener su autógrafo: "Doctor Luna". Presto, el autor giró sobre sus talones y se volvió hacia mi, accediendo a firmarme el ejemplar de "Yrigoyen" y departir unos instantes amablemente. "A Diego cordialmente, 1983", escribió de su puño y letra. En pocos días, había leído el libro y me había convertido - como su autor - en un devoto yrigoyenista y un radical convencido.
Fue mi primer encuentro con el notable intelectual y desde entonces profundicé mi conocimiento sobre su obra y consecuentemente creció mi admiración por él.
El destino y su personalidad llana y amable me facilitó poder acercarme a él, como a miles de jóvenes a quienes recibía con frecuencia. Desde la militancia juvenil en la UCR varias veces recurrimos a su sabiduría y su compromiso democrático para convocarlo a conformar mesas redondas y paneles que permitieran acercar a las jóvenes generaciones de radicales a la historia partidaria y a las grandes figuras rectoras.
No era difícil obtener una entrevista con él, en la redacción de "Todo es Historia" en la calle Viamonte o en su estudio de Reconquista. Siempre se mostró generoso y abierto para evacuar la curiosidad de los jóvenes de entonces.
Por mi afición a los estudios históricos también le debo gratitud por permitirme colaborar con su prestigiosa revista y por haber aceptado siempre mi requisitoria a participar de alguna actividad de difusión cultural o incluso algún emprendimiento político no partidario, ya que preservó su condición de ciudadano independiente no afiliado a ningún partido desde el retorno de la democracia.
Así, su incorporación al Instituto Yrigoyeneano (fundado en 1948 y al cual estuvo vinculado en sus orígenes cuando escribió su primitiva "Yrigoyen, el templario de la libertad" como Tomo 1 de la inigualable "Hipólito Yrigoyen, Pueblo y Gobierno", editado por la Editorial Raigal de los hermanos Sobral ) se transformó en designación como Miembro Honorario por la Ley 26040 que creó el Instituto Nacional Yrigoyeneano.
Y especial mención merece también su aceptación a cofundar el Grupo Aurora de una Nueva República, su última actividad pública. Ya bastante enfermo, compartió con un reducido núcleo de amigos (Marcos Aguinis, Atilio Alterini, Fernando Blanco, Horacio Sanguinetti, Juan Vicente Sola y el suscripto) un almuerzo en el Club del Progreso, donde se resolvió la creación de ese espacio de defensa de los valores democráticos.
Poco antes de ser internado pude volver a encontrarme con él para llevarle un proyecto de libro que aceptó prologar sin que la salud le permitiera llegar a hacerlo. Hablamos del país y del radicalismo. Me correspondió comunicarle que el Instituto Nacional Yrigoyeneano deseaba designarlo Presidente Honorario y le consulté si estaba dispuesto a aceptar: "Acepto por don Hipólito. Por don Hipólito, todo". Me respondió. Tampoco hubo tiempo.
Me considero un privilegiado por haberlo conocido, haber podido compartir reflexiones con él, por haber sido colaborador de "Todo es Historia" y por haber compartido espacios institucionales como el Instituto Nacional yrigoyeneano y el Grupo Aurora.
Se ha dicho que fue un intelectual prolífico, casi como aquellos del Renacimiento, que destacó en toda actividad que desarrolló: historiador, novelista, poeta, artista, periodista, político, hombre de estado.
Sin embargo me quedo con una definición: fue un militante. En sus tiempos juveniles lo fue de la UCR y de la UCRI, convocado por el mensaje renovador y desarrollista de Frondizi "su antiguo jefe y maestro", escribió alguna vez él mismo.
Luego, sin adscripción partidaria formal, siguió siendo un militante radical. Si no en los papeles, lo fue en los hechos, en la sustancia y en las convicciones profundas.
Su obra intelectual y cultural fue claramente una actitud militante y comprometida, formadora de los que abrevamos en su labor, en su sabiduría y en su consejo.

Diego Barovero

miércoles, 18 de noviembre de 2009

FRENTE A LAS TRAICIONES


Hace 118 años comenzó un sueño redentor, el de cientos de miles de radicales que nos precedieron, algunos ilustres otros sencillos.
Escribió Don Hipólito sobre la Unión Cívica Radical: "No es un partido más, cuya acción se limita a ser sólo una oposición a las calamidades gubernativas...ni una parcialidad que lucha en su beneficio...ni una composición de lugar para tomar asiento en los gobiernos..."

El radicalismo no es un partido más, no es construcción efímera, ni un proyecto individual, es un sueño colectivo que ha atravesado tres siglos.
Frente a la felonía o la traición esto debe reafirmarse para no volver a equivocarse.
Moisés Lebensohn afirmaba que el radicalismo no es una etiqueta que se coloca sobre un hombre como sobre un frasco en una droguería. Es un contenido. Quien no alienta pasión de justicia y a su influjo gobierna su vida, no es radical por más que así se titule y por alta que sea su ubicación en el escalafón partidario, es una forma de conducta y un estilo de vida

Solo los liderazgos o los movimientos de ocasión se juegan la vida en una elección, los radicales como alguna vez dijo Balbín hemos roto los relojes, porque sabemos que nuestros hijos llegaran a tiempo. Mas allá de los mejores deseos de un buen resultado en el 2011, seguramente el lunes siguiente estaremos nuevamente en la lucha por la Argentina soñada. ESO NOS HACE DISTINTOS Y NECESARIOS PARA LA REPÚBLICA.
DR GUSTAVO ARAMBURU
MIEMBRO DEL INSTITUTO YRIGOYENEANO

LAS SOMBRAS DETRÁS DE COBOS


Como siempre bienvenidas las réplicas y el debate. Aquí un artículo del titular de ERA (Encuentro Radical Autónomo), Horacio Minotti. Habrá que caminar hacia la unidad con verdad. Nadie debe ser descalificado o prejuzgado. Pero ese camino ineludible hacia la unidad requiere analizar todas las circunstancias.

LAS SOMBRAS DETRÁS DE COBOS

La ambición no es un pecado. De hecho, suele ser el motor de los grandes logros, personales y colectivos. Pero como todo, el exceso trae complicaciones, degenera los proyectos, las ideas y complica el futuro a mediano plazo. Julio Cobos quiere ser presidente, y ha comprendido, después de mucha resistencia, que sólo podrá serlo con el radicalismo detrás. Es lógico, es inteligente de parte del vicepresidente, pero ha incurrido en la tentación de comprar lo hecho, mal hecho, contrahecho, lo que requiere menos esfuerzos, pero lo que es ciertamente muy peligroso.

Hay que decir sin medias tintas que hoy, el operador más importante de Julio Cobos se llama Enrique “Coti” Nosiglia, por intromisión del capo radical y por aceptación abierta del propio Cobos. El mendocino dio con gusto al Coti ese espacio, y él lo disfruta, porque ve nuevamente la posibilidad de llegar al poder. Sindicado y señalado por la sociedad como el “monje negro” de Raúl Alfonsín, creyó que su destino terminaba, al menos desde lo político, con la caída del gobierno del viejo líder.

Pero Nosiglia volvió inesperadamente hasta para él, con el gobierno de Fernando De la Rúa, por obra y gracia de algunas de las personas más cercanas del derrocado presidente, entre ellas, el vecino del Coti en la quinta de Villa Rosa, Fernando De Santibañez. Caído De la Rúa, nada indicaba que Nosiglia podría volver a estar tan cerca del poder, pero como lo hizo con De la Rúa, impuso ahora su presencia a Cobos, y nuevamente está a punto de desembarcar.

Historias similares han ocurrido con Leopoldo Moreau que taponó y obstruyó junto a Federico Storani la carrera interna de, por ejemplo, Ricardo Alfonsín, e incluso la de Margarita Stolbizer que terminó por irse del partido radical. Fueron muchos los que huyeron por las múltiples maniobras de estos muchachos para mantener el dominio de la UCR y evitar que el mismo se renovara.

La semana pasada, en el Hotel del cual casi seguro es dueño Nosiglia, el Elevage, estuvieron reunidos varios de sus lugartenientes para decidir quien será el próximo presidente de la UCR porteña. Porque así, crítico como es el radicalismo del verticalismo peronista, las autoridades partidarias suelen definirse en la habitación de un hotel, en un departamento o una oficina, porque no una mesa de un bar céntrico. Nada de democracia, nada de afiliados, nada de militantes.

En esa reunión se decidió que estaba superada la etapa en que la estrategia radical era intentar mostrar una renovación partidaria para acercarse a la sociedad, y que terminó con el joven abogado Carlos Mas Vélez como presidente, y con otro joven Marcelo Montero como vice. Nosiglia comunicó a los suyos la decisión de que para acompañar la presidencia de Cobos, y especialmente copar la campaña, el presidente debería ser un veterano, por supuesto de su palo, y seleccionó a Facundo Suarez Lastra, intendente porteño durante el gobierno de Alfonsín.

Pero el Coti no es el único que ronda a Cobos. Por ahí también está Jesús Rodríguez, que con un poco mas de reparos por su cercanía con Gerardo Morales, también acompaña, el santafesino Luis “Changui” Cáceres, y por supuesto los inefables Moreau y Storani. Hace apenas un año, cuando Cobos no lo recibía el viejo Freddi, había declarado “un tipo que se llama Cleto no puede hacer política”, pero la conveniencia rápidamente lo hizo cambiar de opinión. La semana pasada, el vicepresidente puso su primer pie en la ciudad de La Plata, de la mano de Storani, que le organizó una presentación a partir de su fundación.

El radicalismo ha mostrado, necesariamente, por el mero paso del tiempo, algunas figuras nuevas que deben construirse y probar su valía: el senador Ernesto Sanz, el diputado Ricardo Alfonsín, el diputado Eduardo Costa (el que le ganó a los K en Santa Cruz), pero Cobos, que aparece como lo nuevo, ha decidido recostarse en lo más viejo, en lo más rancio de la vieja política radical. Vicios interminables de una política que parece un círculo vicioso.
Dr Horacio Minotti
Editor de Punto Jus

http://www.puntojus.com.ar/html_15/cobos_15.html

martes, 17 de noviembre de 2009

LOS PROBLEMAS DEL RADICALISMO


Este enfoque sobre la realidad del Radicalismo de los años 40, hecho por Moisés Lebensohn,es muy ilustrativo para conocer lo que ocurría en esa época. Hoy afortunadamente no ocurre.....
Hugo Turrini


LOS PROBLEMAS DEL RADICALISMO
Discurso inaugural del V Congreso de la Juventud Radical de la Provincia de Buenos Aires, pronunciado en Chivilcoy el 24 de mayo de 1940.




Nos hallamos reunidos en momentos solemnes. En todos los horizontes, hombres y mujeres luchan y perecen, en mares y campos de batalla, por la pervivencia del ideal de la libertad y en las silenciosas retaguardias extenúan sus esfuerzos para posibilitar la resistencia. Los pueblos americanos oyen, vivas y rotundas, las voces de sus fundadores y escuchan su llamamiento en defensa de los principios que agitaron al continente en la hora inicial de su emancipación. En este concierto del mundo que se estremece entre los dolores de un alumbramiento; en este concierto en que aun las propias potencias agresoras mueven a sus multitudes alucinadas por falsos ideales, pero ideales al fin para los seres anónimos que las forman, solo nosotros, los argentinos, contemplamos en la inacción y en la despreocupación como los otros combaten y como del resultado de este combate surgirá la estructura económica y social que condicionará nuestra existencia futura. Como argentinos, nos contrista esta realidad. Nos agobia y avergüenza ver a nuestro país debatiéndose en pugnas minúsculas; con lideres políticos, educacionales y económicos, carentes de impulso creador y valiente; sin ansiedad quemante de justicia; exhibiendo en sus luchas no el coraje abnegado por colocar a nuestra patria en el clima histórico de la época, sino la apetencia del poder como medio de disfrute. Mientras el mundo penetra en una aurora impregnada de sentido heroico de la vida, en los círculos directivos de la Argentina - en todos los círculos directivos- priva el sentido del goce sensual de la vida. Pareciéramos un país secular, entrando en decadencia, describiendo el descanso de la parábola, sin conciencia nacional ni conexión con las fuerzas espirituales que animaron a muchos padres, sin respetabilidad en la forjación del porvenir ni sensibilidad para conmovernos ante el drama humano.
Y somos, sin embargo, una joven nación, que aún tiene los huesos blandos y debiera vivir los sueños de la adolescencia.
Y somos sin embargo un pueblo joven, predispuesto a las empresas del desinterés y el sacrificio por su tendencia emocional y porque no es en balde, en cada uno de nosotros - hijos cercanos o lejanos de la inmigración-, bulle el recuerdo del antecesor arrojado que rompió las ataduras más sólidas del hombre, aquellas que lo unen a su tierra, la del trozo de suelo en que yacen sus padres, la del trozo de cielo que contemplaron absortos los ojos infantiles, la del dulce idioma en que los labios maternos modularon las canciones de cuna, las ligazones de la sangre y del pasado, para cruzar el océano y llegar a lo desconocido, a este asilo de ilusión, en búsqueda de bienestar y libertad.
Un país poblado por un pueblo así, en cada uno de cuyos hombres alienta tan íntima y tan valiosa herencia espiritual, no puede ser un país silencioso ante la injusticia, un país indiferente ante las exigencias de su deber, un país que no quiera igualarse en ideales y afanes con aquellos que marcan la excelencia de estas jornadas.
Como aires de fronda. Es un viento que hace crujir las viejas ramas. Es un viento que no encuentra fronteras. A sus ecos, despiertan en los hombres de todas las razas y altitudes ideas nuevas y voluntad de darse íntegramente en la acción para librar a las generaciones futuras de las angustias que oprimen a la actual, con tanta intensidad, que sentimos orgullosos el privilegio de vivir el trance en que la humanidad verifica dolorosamente su reordenamiento, quizás por siglos.
El drama profundo de la política argentina.

Este viento cruza también sobre nuestras pampas. Agita las conciencias de millares y millares de argentinos. Y palpita en el escepticismo de las últimas promociones juveniles, escepticismo fecundo, porque señala la insurgencia ante un presente que abochorna y encierra en si, grávidas, las posibilidades del mañana. No lo han advertido, únicamente, quienes tienen la función natural de actuar como antenas sutiles de las ansiedades y requerimientos del medio social y como conductores de su pueblo. Solo los políticos argentinos en su casi totalidad, no han percibido el angustioso reclamo que importa el retraimiento de la juventud. Y si esta ineptitud pudiera entenderse en cierto modo explicable en los dirigentes de las derechas, hombres de círculos e intereses limitados, implica un verdadero suicidio en quienes militan en el Radicalismo, expresión política de ese inconcreto pero firme ensueño de justicia y renovación que anima el pueblo argentino.
Es que nuestros partidos viven con la mentalidad de principios de siglo y sus planas dirigentes, con los incentivos morales y materiales de principios de siglo. Desde hace mucho, sus cuadros activos no definen la orientación ética ni el pensamiento politicón de las corrientes populares que deberían representar. Ese es el drama profundo de la política argentina. Y sin que se llegue a la solución de ese drama, aunque se salve el escollo del fraude, no habrá más que ser apariencia de un juego democrático auténtico. Que ello suceda en las derechas tiene justificación. Desde 1930 el pueblo que no le es adicto no elige; es mandado. La elección de sus dirigentes carece de base popular. Pero en nuestro partido, ¿qué ocurre?
Hasta 1916 la máquina partidaria sirvió con eficacia los propósitos que le dieron origen. Había una idea central, dominante: el sufragio libre, causa motor del partido y aspiración vehemente de una época. Fueron sus lideres quienes con mayor tesón, con mayor pureza, lucharon por esa aspiración, contribuyendo a crear una conciencia del derecho en el pueblo argentino. Llegó el triunfo en 1916. Desalojó a las oligarquías políticas de las provincias. Y quedo como girando en el aire. No se atrevió a consumar la revolución radical - como gustaba decir Yrigoyen - destruyendo los privilegios de la oligarquía económica. Se limitó a una política social oportunista, actuando solo bajo el apremio de las circunstancias, Detrás de los acontecimientos y no antes, en prevención de los acontecimientos.


La política del servicio personal.

La eficiente máquina política y sus cuadros directivos, formados en treinta años de lucha, quedaron un tanto sin los motivos galvanizantes de su acción. La gran bandera que congregó a la masa popular, el sufragio libre, era conquista lograda. El proselitismo, función inherente e inseparable a la política, debió acudir a otros resortes. Y se descendió del plano idealista, a la «política del servicio personal», la conquista de voluntades no por motivos atinentes al país, al orden público, sino por servicios, atenciones, empleos, favores lícitos o ilícitos, efectos, amistades... En lugar de enaltecer el espíritu cívico de cada ciudadano, se involucionó, trastocando las razones cívicas, por otras de tipo personal que implicaban una corrupción encubierta del voto, función eminente de la ciudadanía, para ser ejercida con la visión exclusiva del interés nacional. El partido nació para obtener, purificar y prestigiar el sufragio. La política del servicio personal desjerarquiza y desprestigia al sufragio y desjerarquiza todo lo que de ella parte. Los ciudadanos dejan de ser tales, en el concepto cabal del vocablo, para transformarse en meros votantes. La ciudadanía pasa de ser la alta dignidad de una democracia, a un bien intercambiable por otros, efectivos o afectivos. Se ha dicho que la teoría democrática reposa en la ficción del desdoblamiento de la persona en el hombre y en el ciudadano. El primero, con una voluntad individual dirigida por sus intereses y sentimientos de índole personal; el otro, con una voluntad general, inspirada en el bien colectivo. El entrelazamiento de esas «voluntades generales» es la esencia de la ciudadanía y su exteriorización y motivación, el método de la democracia política. Los cuadros activos del partido, en su gestión preponderante, no se dirigieron a la «voluntad popular» de los argentinos, sino a su «voluntad individual», subversión y negación democrática.

LA UNIÓN VALE LA PENA



Debemos comprender la realidad en su conjunto y asumirla, como base para el posicionamiento de nuestro partido y para la construcción del camino hacia el crecimiento.
Las expectativas de la sociedad aumentan día a día y nos exigen a los radicales, como en toda nuestra historia, mucho más que a otras fuerzas políticas. La misión es estar a la altura del reclamo.
Pongamos en práctica métodos renovadores y modernos en la acción interna, recreemos las propuestas progresistas.
Sepamos que "lo fugaz no es conveniente", que “el compromiso real es un objetivo permanente” y por cierto que "la fama no es igual al prestigio".
Demos impulso a nuestros ideales respetando el disenso. Que sea éste también causa de nuestra pasión y entrega. Nada tiene más valor ni importancia que disentir con el fin de llegar a coincidencias, con el empuje y la intensidad de la vocación de servir a la Nación.
En este marco, la unión de los radicales ya no es una aspiración, es una necesidad que debemos asumir con responsabilidad, nobleza y desinterés personal o sectorial.
Los hechos que vive nuestra República ponen en evidencia que ese acuerdo es vital para sostener la Democracia que los autócratas quieren ver muerta.
Esa conjunción tan necesaria solo puede fundarse en la concordia construida con serenidad y responsabilidad histórica.
Valoremos la fogosa acción de pertenencia a distintos grupos internos, pero aportemos estos valiosos elementos a una causa superior y de mayor nobleza. No ha de significar ello, renunciar o abdicar a los pilares fundantes de distintos sectores del pensamiento radical. Tampoco el caer en amontonamientos que el ciudadano rechazará por frágiles y especulativos.
Coincidamos en que nuestros esfuerzos deben concentrarse en las cuestiones que hacen a la dignidad del hombre, fácil de enunciar y difícil de lograr.
Para todos los radicales la Dignidad es la lucha infatigable para eliminar la pobreza, la miseria, la ignorancia y la desesperanza en las que nos han sumido a millones de argentinos. Por razones éticas y políticas la tarea principal es encontrar los caminos convergentes para terminar con esta injusticia social.
Los fantasmas del conflicto entre correligionarios, el riesgo de perder la seriedad indispensable, la acción de la pasión sin la razón, atentan directamente contra nuestra propia capacidad para atacar los problemas del hoy.
En definitiva he comprendido en el andar y el hacer, que la unidad no es "unicato", por el contrario ha sido y es una condición central de la fuerza de nuestro partido.
La concordia y la concertación que surgen de las divergencias, son también una herramienta de incalculable valor para recuperar la dignidad de nuestros conciudadanos.
Desde luego no alcanza con invocar la unión y la concordia, hay que realizarla.
Demostremos como en 1983, que somos capaces de ofrecerle a la Nación un Partido Político institucionalmente sano y fuerte, presente en todo su territorio.
Elaboremos una propuesta sólida y consistente para enfrentar la crisis moral, social, institucional y económica más grave y profunda que padecemos desde la recuperación de la Democracia que nos legara Raúl Alfonsín, provocada por este gobierno.
Ofrezcamos nuestra lucha incondicional para que de una vez y para siempre se terminen en nuestra Patria la oficialización de la mentira, la censura, la indignidad, la beligerancia, la insolidaridad y la insidiosa acción de culpar a los opositores de las propias acciones antidemocráticas y desestabilizantes del poder central.
Otra vez la lucha es por el Nunca Más.
Vamos a recuperar esos valores. Vamos a ofrecer credibilidad y fe a nuestro pueblo vapuleado. Hablemos con él y persuadamos a todos los que puedan acompañarnos en este noble sueño. Recreemos la mística que frene el hastío y la desesperanza. Difundamos con humildad y grandeza que aspiramos a trascender este tiempo y que sólo nos moviliza el supremo objetivo de la lucha permanente por recuperar la Dignidad del hombre pisoteada, la República herida y la Grandeza de una Nación aislada del mundo.
TOMÁS BRES

ALGUNAS REFLEXIONES INTRODUCTORIAS SOBRE LA REFORMA POLÍTICA


GRACIAS MARÍA INÉS LLITERAS!!
Hugo Turrini

La prudencia es una virtud que a veces nos olvidamos de practicar y que sin embargo es tan necesaria como la audacia para quienes hacemos Política.
Por Prudencia es justamente que debemos evitar banalizar las cuestiones importantes y trascendentes porque en caso contrario corremos el riesgo de vaciarlas de contenido y significado y convertirlas en el mejor de los casos en muletillas de compromiso y en el peor en letra muerta que lleva al hastío a fuerza de ser repetida.
La denominada Reforma Política nos exige un tratamiento mesurado y fundamentalmente reflexivo ya que puede resultar que aquello que en apariencia sea un progreso en verdad signifique un retroceso.
El Fin de la Reforma Política debe ser profundizar las bondades del Sistema Democrático y mejorar sustancialmente la calidad de las instituciones que regulan nuestra convivencia en la forma republicana.
Reforma Política no es sinónimo de Reforma Electoral. Esta última es sólo una parte de ella y la primera no puede ni debe agotarse sólo en supuestos cambios en los mecanismos electorales.
Un sistema no es una simple sumatoria de pedazos sino un Todo compuesto de partes interrelacionadas, interdependientes y funcionales entre sí. Cualquier modificación a una parte repercute en todas las demás y resiente el funcionamiento sistemático y por ello toda reforma debe ser pensada en forma integral previendo sus consecuencias.
No debemos perder de vista que nuestro país hizo hace quince años de la mano de Raúl Alfonsín una profunda Reforma Política al sancionar la Constitución de 1994 ¿Acaso no es una profunda reforma política instaurar el mecanismo de Segunda Vuelta para la elección presidencial? ¿No lo es, más allá del juicio que hoy nos pueda merecer, el crear el Consejo de la Magistratura? ¿No lo es el aumentar el número de senadores por provincia incorporando las minorías y eligiéndolos en forma directa? ¿No lo es la incorporación al sistema de mecanismos de Democracia Semi directa aunque estén poco empleados? Tanto lo es que me remito sólo a dos hechos recientes y muy conocidos para demostrarlo: la elección presidencial del año 2003 y el rechazo de la Resolución Nº 125 por el Senado Nacional el año pasado ¿Qué hubiera sucedido en esos dos casos si no rigiera la Constitución de 1994 y estuviera en vigencia la de 1853 reformada en 1860 y en 1957?
No hay duda que seguramente hay que hacer más y a ello debemos dedicarnos con creatividad pero fundamentalmente con responsabilidad. Sin duda debemos encontrar mecanismos regulatorios que afirmen aún más la independencia de los Poderes del Estado, que profundicen la transparencia en los procesos electorales y que contribuyan al mejoramiento de la representatividad, que tiendan al fortalecimiento o si se prefiere al refortalecimiento de los Partidos Políticos como actores excluyentes de la vida política, que fomenten y estimulen una mayor participación ciudadana, que impregnen de contenidos éticos a la acción política, que favorezcan el respeto a las minorías, que promuevan el diálogo permanente en el seno de los órganos institucionales, que ayuden a erradicar las prácticas clientelares, que acerquen al Estado a la gente y que mejoren la calidad de las decisiones para citar algunas de las necesidades en las que pienso.
Pero no debemos tampoco dejarnos seducir por el canto de las sirenas y creer vanidosamente que hacer la Reforma Política es sólo debatir acerca de los textos más apropiados para volcarlos a una legislación. Sería ingenuo y a la vez presuntuoso y sólo serviría para aturdir nuestras conciencias militantes creyendo que hicimos lo que debíamos.
La Política la hacemos los seres humanos, mujeres y hombres de carne y hueso con pasiones, con ambiciones y con intereses. Todos los seres humanos tenemos un lado oscuro. Ni somos intrínsecamente buenos ni somos intrínsecamente malos. Somos esencialmente imperfectos y nuestras realizaciones, por lógica consecuencia también lo son. Entre ellas la Política, que se hace en la realidad y no en un ambiente estéril y aséptico.
Hay además hábitos, usos y costumbres que por reiterados se han arraigado y se han institucionalizado con cierta guiño cómplice relativista e indulgente.
Por eso la Reforma Política va más allá de mera normativa aunque ésta sea necesaria e imprescindible, no sólo para regularla sino también para impulsarla e imponerla. La Reforma Política profunda debe significar un Cambio Cultural que modifique los modos y las formas de hacer Política porque se aspira a un cambio en el fondo de la misma. Los cambios culturales se expresan, se ven y se reconocen en la superficie exterior pero se dan en verdad en las profundidades interiores. La fortaleza de los más altos edificios no está en el último piso ostentoso sino en la humildad oculta de sus cimientos.
El primer paso debe ser tener muy claro el conjunto de Valores que aspiramos plasmar y convertir en un Bien anhelado y deseado. Esos Valores deben impulsar nuestra Voluntad. Si en el interior de cada uno de nosotros no anida la Voluntad, hasta si se quiere la Voluntad imperiosa e imperativa, la Pulsión y la Compulsión de mejorar la acción política no nos sentemos siquiera a debatir porque estaríamos estafándonos en forma gatopardista. Aquí y ahora no cabe la hipocresía de cambiar algo para que nada cambie.
Si por el contrario verdaderamente sentimos dentro nuestro la Pasión por el cambio profundo, si sentimos un vacío íntimo que reclama llenarse, si sentimos una insatisfacción poco menos que insoportable con las formas de hacer la Política, no dudemos y arremetamos porque veinticinco años de Democracia recuperada, no para nosotros como militantes, sino para el Pueblo nos lo exigen.

RESURGIMIENTO RADICAL AVELLANEDA

jueves, 12 de noviembre de 2009

LA PRESIDENCIA DE BLOQUE Y OTRAS YERBAS.....


El Radicalismo abrió las puertas para el regreso de Julio Cobos, sin dudas el presidenciable con mayores posibilidades. El 28 de junio la sociedad votó contra el "modelo" y uno de los artífices de la buena elección del Acuerdo Cívico y Social (sobre todo en la provincia de Buenos Aires) fue Ricardo Alfonsín.
Hoy nos encontramos con la realidad de un "hijo pródigo" que vuelve a su casa y quiere imponer sus nombres. También, con la de un Diputado nacional recientemente electo que aspira directamente a la titularidad de bloque. No voy a emitir juicios sobre estas realidades. Estas competencias son parte de la política.
Uno se cansa de la continua puja por el poder. Ahora: alguna vez se seguirán a ideas y no a hombres? (como repetimos y nos jactamos) Alguien quiere lo mejor para el Radicalismo y , sobre todo, lo mejor para el país? Se pone tanta pasión en el acercarse a la gente y sus necesidades? Se pone tanta pasión en la formación de grupos de trabajo y en la elaboración de programas? Parece que toda la energía se volcara a estas pujas personalistas. Creo que más que nunca reivindico la visión de Lebensohn. Sus pensamientos son plenamente aplicables a la realidad actual.Percibo que el hombre común piensa que está al margen de todo esto y sus problemas no le interesan a nadie.
Suelo ser positivo. Será que hoy no es mi día??jajja.
Simplemente reflexiono en "voz alta".
Creo que más allá de acuerdos de cúpulas debemos buscar una síntesis que ponga a un Radicalismo en carrera para ganar las elecciones y, lo más importante, gobernar con solvencia. Les mando un fuerte abrazo a todos!
Hugo Turrini

martes, 10 de noviembre de 2009

ALFONSÍN. COBOS. LA CUESTIÓN DE LOS DIPUTADOS. EL TEMA ES EL LÍMITE A LA TRAMPA



Comparto con ustedes este artículo del licenciado Campero. Para reflexionar. Cada uno sacará sus propias conclusiones. Abrazo!
Hugo Turrini

La cosa es así: un grupo de Diputados Nacionales promueve para la Presidencia del Bloque al Dr. Ricardo Alfonsín. Esta candidatura contaría con el apoyo de la mayoría del cuerpo. A los efectos de asegurar la reelección del Dr. Oscar Aguad, el Ing. Julio Cobos en alianza con la burocracia desplazada en la Provincia de Buenos Aires promueven que debuten ya los diputados del CONFER que responden al Vicepresidente de la Nación cuyo regreso (el de todos) auspiciamos y en tiempos que era difícil sostener esta posición. http://ricardocampero.blogspot.com/2008/11/nota-242-por-un-dialogo-radical-con.html
Nosotros lo hicimos para favorecer la unidad y no para alterar un resultado de una controversia que solo el Bloque en su actual estructura debe resolver: si el debut se produce de esa manera y quién será su Presidente. La Mesa de la Convención Provincial, inclusive, resolvió habilitar a los de su jurisdicción y en controversia con la Carta Orgánica. http://ricardocampero.blogspot.com/2009/10/nota-439-el-reingreso-cobista-la.html
De este modo esa burocracia hizo su aporte a la cooperativa gestada para frustrar la Presidencia de Ricardo Alfonsín. Es que no tienen otro peso en el Bloque y sí mucho espacio burocrático a preservar y que proviene del radicalismo chico. No me meto en sus decisiones. Es mi obligación de afiliado no intervenir en cuestiones que hacen a la soberanía de nuestros diputados. Salvo la de decir que acá no decidan los que fueron en la boleta de Cristina Kirchner y después bienvenidos.
Ricardo Alfonsín tiene un solo destino: ponerles límite. Y cualquiera fuere el camino que decida para ello tiene nuestro apoyo militante. Sea o no el Presidente. Y el Vicepresidente de la Nación deberá abstenerse de incidir en la vida del Partido al que aún no se ha reincorporado. Nosotros no decidimos como los peronistas por que nadie nos dá órdenes de arriba. Y defendemos la autoderminación de nuestros cuerpos partidarios y legislativos aún claudicaciones interesadas como la de la Mesa de la Convención de la Provincia de Buenos Aires, entre otras. Ponerles límites a la vez de promover la unidad es un imperativo de un Partido de futuro.
"Un límite no es aquello en que algo se detiene sino, como reconocieron los griegos, el límite es aquello en que algo comienza su presentarse". (Martin Heidegger). El del radicalismo victorioso en el 2011.
LICENCIADO RICARDO CAMPERO
FUENTE: http://ricardocampero.blogspot.com/

miércoles, 4 de noviembre de 2009

MOISÉS LEBENSOHN POR ALFONSÍN



LEBENSOHN Y LA ACTUALIDAD

Por Raúl Ricardo Alfonsín

Decía Moisés Lebenshon, al inaugurar un Congreso Juvenil en 1952: "Salvemos a la Argentina…liberando a nuestra patria de la presión internacional y de los factores económicos y sociales que la configuran. Si logramos hacerlo, veremos entonces cómo en la Argentina no habrá más fraude, ni dictadura, ni iniquidades que se cometan contra la dignidad del hombre y del pueblo. Este es el gran programa del radicalismo y de la juventud: liberar a la patria. Debemos cumplir esta misión en momentos en que cruje la estructura del mundo;… en que las fuerzas del privilegio internacional luchan por mantener el "status quo" en todas las áreas que controlan y sin reparar en medios ni formas. Debería ser éste el momento en que los argentinos habláramos el idioma de San Martín y conquistáramos nuestra independencia total ante todas las naciones del mundo, repitiendo palabras de Irigoyen, según quien la vida de los hombres debe ser sagrada para los hombres y para los pueblos."
Estos pensamiento de ese extraordinario luchador por la democracia, la justicia social y la lucha contra la presión internacional que fue Lebenshon, cobran en la actualidad más fuerza que nunca, ante los desmanes imperiales del gobierno de los Estados Unidos y las presiones inadmisibles que vienen sufriendo los países que se oponen a su oprobiosa política.
Desde luego, después de la invasión a Irak y el consecuente inicio de una guerra sin tiempo y sin códigos, no podía esperarse que las presiones desaparecieran y, sobre todo, que no recayeran con más fuerza en nuestra América Latina, luego de advertirse las primeras consecuencias del desastre ocasionado.
Sucede que ahora se nos pretende vincular a tareas que logren impidir cualquier tipo de acción de lo que han dado en llamar la democratización de Irak para regresar a la normalidad institucional, claro está, después de transcurrido el tiempo necesario para llevar a cabo todos los negocios.
Se nos ha pedido que enviemos a la gendarmería para garantizar la seguridad. Yo no sé bien, cual es exactamente la posición del nuestro gobierno. Pido disculpas si estoy equivocado, pero creo haber entendido de la lectura de los diarios que existe cierta desorientación, a juzgar por declaraciones que me parecieron distintas. Según creo recordar el Presidente de la Nación, en un primer momento, se refirió a la necesidad del requerimiento del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Posteriormente, luego de su muy buen discurso sobre las Malvinas, el Ministro Rafael Bielsa fue categórico en el sentido de que no se enviarían tropas, pero señaló un tanto confusamente que le expresó a Kofi Annan que la posición argentina se establecía en el marco de la resolución 1483 de colaborar en las tareas de la paz bajo el mandato de su delegado. Aunque agregó con gracia lo que interpreto como una fina ironía sumamente expresiva: "La oferta la tiene Annan y él nos tendrá que decir qué necesita, por ejemplo, instructores para la formación de la policía de tránsito de Bagdad."
Desde luego, queda claro que no lo harán si están a las órdenes de los invasores, pero observo actitudes más oscuras si llegara a tratarse de una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, aunque no corresponde tener dudas acerca de que el Canciller siguió instrucciones del Presidente.
Además, el propio Consejo de Seguridad ha actuado de manera que a mí entender le resta confiabilidad. Una vez que el gobierno de Estados Unidos advirtió las enorme dificultades con que se encontraba en Irak, decidió recurrir a las Naciones Unidas, a la que con anterioridad había despreciado y humillado. A partir de la resolución del 22 de mayo, la ONU y los invasores trabajan juntos en ese país. Dicho en otras palabras, el delegado del Secretario General, debe reconocer a "la autoridad", término con el que se define a las fuerzas de ocupación.
Nuestra posición es que desde ningún punto de vista y bajo ninguna circunstancia debemos enviar ninguna fuerza de seguridad. Conociendo lo que está sucediendo en Irak, donde la enorme mayoría del pueblo, sin distinción de religiones o partidos reclama cada vez con más ira que se retiren los estadounidenses. No puede caber duda que, estén a las órdenes de quien sea, su misión última será la de reprimir, y a esto, como lo decía Lebenshon, no lo podemos hacer, si queremos liberar a nuestra patria de presiones internacionales en momentos en que la estructura del mundo cruje más que en su época.
Si de ayuda humanitaria se tratara, la Argentina debiera echar mano a la organización de los Cascos Blancos, que esperamos que el gobierno no haya olvidado en su pertinaz búsqueda de originalidad.
Pero el Secretario general de la ONU ha tenido una idea peregrina: la de enviar fuerzas de paz a Irak, como si no supiera que los cascos celestes actúan cuando dos países en pugna lo solicitan, ya sea para garantizar la paz, o para resguardar las condiciones que dieron motivo a la terminación de la guerra. Desde luego, el caso de Irak nada tiene que ver con estas situaciones.
Decía Lebensohn que en cualquier otro sitio la Patria puede ser una mera expresión geográfica, pero en la Argentina es, no una porción de tierra, sino un contenido moral y un sentido histórico ligado a la idea fundamental de la libertad…los forjadores de nuestra libertad no quisieron crear un país más. Cuando el Gran Libertador descendió con sus tropas en las playas de Pisco, dijo una frase que es el lema de los argentinos: "Nuestra causa es la causa del género humano."… quienes se alzan contra el sentido de libertad y contra los contenidos profundos que dieron nacimiento a nuestra Patria, son perjurios del sentimiento de la Argentina."
Así ocurriría si alguien pensara en enviar nuestras fuerzas armadas a una mascarada del poder con el propósito de esconder la verdadera naturaleza de una guerra sin sentido, la masacre de civiles, las mentiras que embaucaron a los pueblos, y de esta manera convertirnos en complacientes seguidores de un oprobio histórico.
Es mi deseo que sirvan mis modestos pensamientos para poner de relieve la importancia y actualidad de los de Moisés Lebenshon y rendirle un homenaje sentido a quien considero una de las figuras preclaras de nuestra Nación.


Raúl Alfonsín, Junio de 2003.

El hombre que pudo cambiar la historia


Sin dudas a Moisés Lebensohn le faltaron años de vida. Hizo mucho, muy joven. Las "borratinas" le impidieron ser legislador nacional. En la presentación del libro de José Bielicki: "Moisés Lebensohn: El hombre que pudo cambiar la historia" ,organizado en el Congreso Nacional por el Instituto Lebensohn, se destacó, a través de anécdotas cotidianas de quienes lo trataron, la personalidad austera y profunda del hombre de Junín, del gran impulsor de la Juventud Radical. Comparto con ustedes un artículo extraído del blog "Pensamiento y acción" (http://pensamiento-y-acción.blogspot.com), escrito por Diego Barovero con motivo del centenario de Lebensohn en 2007.
Personalmente, creo que Moisés "cambió" la historia porque cambió la estructura mental de los que bebieron y beben en sus ideas. Su hijo hizo hincapié en las "ideas" y no en el "hombre". La semilla de este dirigente, fundador del "diario Democracia" ha germinado. Su planta sigue creciendo. La historia sigue transformándose...
Hugo Turrini


Moisés Lebensohn y su legado
por la Argentina soñada

por Diego Barovero (*)

Moisés Lebenshon, nació en Bahía Blanca, Provincia de Buenos Aires, el 12 de agosto de 1907; su familia se radicó en Junín, donde ejerció su profesión de abogado y periodista. Así, a los 24 años en 1931 fundó el diario "Democracia", ejemplo de periodismo comprometido con los valores democráticos aún en la actualidad.
Lebenshon, fue un activo militante de la Unión Cívica Radical. Puede decirse de él sin margen de equivocación que fue el gran organizador de la juventud radical, herramienta fundamental para la renovación del radicalismo que debía realizarse indefectiblemente para retomar la senda emancipadora y antiimperialista definida por Hipólito Yrigoyen, de quien fue continuador ideológico.
La principal preocupación y tarea de Lebensohn fue precisamente darle mayor autonomía y sistematización a los fundamentos doctrinarios del radicalismo, definiéndolo claramente como una expresión política de avanzada, liberadora, popular y progresista.
Es curioso, pero a pesar de sus condiciones intelectuales y capacidad organizativa, Lebensohn casi no tuvo oportunidad de desempeñar cargos electivos: solamente fue concejal (electo en 1936) y convencional nacional constituyente (electo en 1949). La utilización del sistema de tachas fue el mecanismo elegido por sus muchos y poderosos adversarios internos para impedirle llegar a ocupar cargos legislativos de relevancia.
Su actuación estuvo más bien centrada en la tarea militante y de conducción política en el desempeño de funciones directivas partidarias en la Unión Cívica Radical. Entre los años 1938 y 1946 fue artífice del Movimiento de la Juventud Radical que realizó cuatro congresos nacionales, siendo los más importantes el de Córdoba (mayo de 1938) y el de Chivilcoy (mayo de 1942). Ese “Grito de Chivilcoy”, como gustaba decir Lebensohn, sacudió las adormecidas conciencias que desde dentro y fuera del partido estaban esperando una aurora de redención. De allí surgieron los fundamentos ideológicos que sirvieron de base para la fundación el 4 de abril de 1945 del Movimiento de Intransigencia y Renovación, del cual fue activo dirigente. Fue el inspirador de la Declaración de Avellenada cuyos principios recogió en 1948 la Honorable Convención Nacional del radicalismo como Bases de Acción Política y Profesión de Fe Doctrinaria. Lebensohn fue también presidente del Comité de la UCR de la provincia de Buenos Aires.
Combatió los viejos métodos electorales, como la "política del servicio personal", que convertían al partido en una maquinaria electoral dominada por caudillejos que luchaban mas por la conquista de prebendas que por ideales. Impulsó el voto directo de los afiliados para combatir las corruptelas de camarillas internas.Fue el más lúcido de su generación, por cierto brillante, integrada por hombres de la talla de Frondizi, Balbín, Larralde, Noblía, Sobral y los Mercader. Comprendió cabalmente los problemas de su tiempo, y por eso en su concepción ideológica adquirieron notoria trascendencia la reforma agraria, la obligatoriedad de la enseñanza media, la política de emancipación económica que contemplara la nacionalización de los recursos estratégicos para el desarrollo como el petróleo y el gas, y en lo social defendía los derechos de los mas necesitados luchando por alcanzar una sociedad mas justa que proteja a todos sus miembros.
Fue un ferviente opositor al régimen fraudulento conservador de los años de la Década Infame y fue también el más inteligente enjuiciador del peronismo, no desde el gorilismo sino desde el ideal democrático y progresista. En 1949 presidió el bloque radical en la Convención Nacional Constituyente que reformó la Constitución Nacional histórica de 1853/60 con sus reformas de 1866 y 1898 y dictó una carta magna de corte cesarista quen incluía la reelección presidencial indefinida. En sus sesiones, Lebensohn pronunció un magnífico discurso que constituye el más inteligente juicio histórico formulado al peronismo. Allí lo calificó acertadamente como una "revolución contra", denunciando las desviaciones autoritarias del régimen como el establecimiento del estado de guerra interno y la penalización del derecho de huelga. Opositor a la consagración de la reelección presidencial indefinida, decidió abandonar el recinto junto a toda la delegación radical sentenciando "¡Volveremos a dictar la Constitución de los argentinos!". Conviene resaltar no obstante ello, que siempre defendió y apoyó iniciativas peronistas como las conquistas sociales de los sectores socialmente postergados y el artículo 40 que nacionalizaba los recursos naturales y energéticos.
Sin embargo, le tocó sufrir persecusión, cárcel y censura por su compromiso democrático y su lucha contra los abusos totalitarios. En 1953 fue elegido presidente de la Convención Nacional de la UCR, donde tuvo una destacada actuación e impulsó una política de confrontación abierta y franca al peronismo que había exacerbado para entonces sus componentes más autoritarios y antidemocráticos, planteando la "lucha en todos los frentes".
Su salud quebrantada lo llevó a una muerte temprana en la más absoluta pobreza el 13 de junio de 1953
Moisés Lebensohn fue un luchador consecuente contra los privilegios de los poderosos, incorruptible en sus ideales y ejemplar en su conducta austera y proba. Consagró una máxima que guió su vida y sirve de ejemplo aún hoy. El desafío del auténtico hombre político es conjugar "doctrina para que nos comprendan y conducta para que nos crean". Su figura consular hubiera quizá impedido desviaciones profundas en el sendero del radicalismo, que lo desnaturalizaron en determinado momento histórico esterilizando su capacidad transformadora.

"DESVALIDOS DE PODER MATERIAL, SIN PRENSA, SIN RADIO, SIN AULAS Y SIN ARMAS, SIN BANCOS NI GOBIERNOS, LIBRAREMOS ESTA BATALLA CON VICTORIOSA CONFIANZA, SERENOS Y LEALES POR QUE SON NUESTROS LA RAZON Y EL FUTURO."

Discurso de Moisés Lebensohn en la Convención Constituyente de 1949.

(*) Abogado, historiador, vicepresidente del Instituto Nacional Yrigoyeneano