miércoles, 26 de diciembre de 2012

Leandro Illia en el Comitè del Parque




Como todos los años, radicales y hombres y mujeres de buena voluntad se dieron cita en el Comitè del Parque, en Gral San Martìn para realizar el tradicional brindis de fin de año.
Este evento fue iniciado por el Dr. Marcos Zimmermann y continuado por su hijo el Dr.Eduardo Zimmermann, a lo largo de las ùltimas cuatro dècadas. Esta casa radical fue casa de resistencia aùn en los años màs negros de la dictadura, donde este encuentro no dejò de hacerse.
El viernes 21 de diciembre de 2012 fue una jornada negra para el paìs con saqueos, destrozos y muertos. Los organizadores, ante la vertiginosa realidad y el peligro de realizar un evento polìtico, dudaron en seguir adelante para resguardar a la gente, que vino de lugares cercanos pero tambièn de pueblos como Lobos, tras varias horas de viaje. Pero el pueblo asistente, tras el paulatino regreso de la tranquilidad en las calles, se decidiò a permanecer en el lugar y compartir el momento de la militancia.
Tuve el honor de presentar el acto, citando a las numerosas personalidades presentes, para entregar el micròfono en manos del anfitriòn Dr Eduardo Zimmermann, quien expresò su preocupaciòn por los momentos que vivìa el paìs pero tambièn dejò su mensaje de esperanza creyendo en un radicalismo capaz de recuperar la `Repùblica,que no es otra cosa que el radicalismo de los principios y valores fundacionales.
En tal sentido se expresò tambièn el candidato a diputado nacional por la ciudad de Buenos Aires, Dr. Leandro Hipòlito Illia quien criticò duramente a la actual conducciòn radical, alejada del sentir de la militancia, proponiendo el radicalismo de la ètica y la visiòn progresista. En tal sentido reivindicò a la figura de Crisòlogo Larralde, artìfice del reconocimiento de los derechos sociales en el artìculo 14 bis de la Constituciòn Nacional, en contraposiciòn a la Constituciòn Justicialista de 1949 a la que juzgò de raìz fascista por basarse en la Carta del Lavoro.
Leandro Illia junto a Nito Artaza acaban de presentar, a principios de diciembre, una nueva lìnea interna con la que pretenden recuperar la esencia radical para adaptarla a los tiempos que corren y servir a nuestra querida Argentina. Son muchos los afiliados que escuchan con atenciòn esta nueva propuesta para un partido que comenzò a recuperarse hacia 2009 pero no ha encontrado el camino definitivo para ser opciòn de gobierno en el paìs.

El hogar de Eduardo Zimmermann y Miriam Martirè agasajò nuevamente con esmero a la gran concurrencia que, finalmente, brindò por un Radicalismo y un paìs mejor para este 2013 que se avecina.





Hugo Turrini

viernes, 5 de octubre de 2012

GOLPE A LA REPÚBLICA

COMO SIEMPRE SON DE TERROR ESTOS PENDEJOS QUE ENSUCIAN LA LUCHA DE LOS PROGRESISTAS ARGENTINOS. DE TERROR Y NO CAMBIAN.
Nos vamos a movilizar. Vamos a resistir la alteración institucional oficialista al destituir a Leandro Despouy de la presidencia de la Auditoría General de la Nación. Fue la comisión Mixta Revisora de Cuentas del Congreso y con los votos del kirchnerismo de manera arbitraria e infundada y obviamente artera y sin previo aviso.
La Auditoría General de la Nación (AGN) es el organismo que asiste técnicamente al Congreso en el control del estado de las cuentas del sector público. Verifica el cumplimiento contable, legal y de gestión por parte del Poder Ejecutivo Nacional; controla la exposición completa, clara y veraz de las cuentas públicas y analiza la administración de los intereses fiscales. Y asesora al Poder Legislativo sobre el desempeño de la Administración Pública Nacional y la situación de la hacienda pública.
ES UN ATROPELLO INSTITUCIONAL Y UN GOLPE A LA REPÚBLICA.
RICARDO CAMPERO

sábado, 29 de septiembre de 2012

NO SE TOCA

Con la ayuda de millones de argentinos de buena voluntad, RAÚL ALFONSÍN hizo que la Carta Magna no fuera solo un librito para estudiar en Educación Cívica, sino que cobrara vida nuevamente como ley suprema de la Nación.
Él la resucitó. Nosotros vamos a defenderla y a hacer que se cumpla en toda su letra y espíritu.
Nosotros vamos a impedir que se reforme mezquinamente.

domingo, 1 de abril de 2012

EL RECUERDO DE RAÙL ALFONSIN, UN DEMÒCRATA Y ESTADISTA INIGUALABLE


por NELSON HAYES


El 31 de marzo de 2009 la Democracia argentina se quedó huérfana. Su padre, Raúl Ricardo Alfonsín, sucumbía a una enfermedad que le quitó paulatinamente la salud, pero no pudo mermar en lo más mínimo su claridad intelectual, su lucidez, ni sus convicciones.

Nacido en Chascomús el 12 de marzo de 1927, Alfonsín comenzó a militar en la Unión Cívica Radical (UCR) desde muy joven, antes de recibirse de abogado. Luego de enfrentarse con Ricardo Balbín, presidente del partido en ese momento, fundó el Movimiento de Renovación y Cambio (MRyC) en 1972. Un año después participó en las elecciones internas como precandidato a presidente, y perdió ante Balbín en dos oportunidades, aunque luego accedió al cargo de diputado nacional.

Durante la dictadura militar formó parte de la Junta Multipartidaria en representación del radicalismo junto a Antonio Tróccoli. Anteriormente, bajo el gobierno de facto de Juan Carlos Onganía, había escrito en distintos medios utilizando el seudónimo de Alfonso Carrido Lura (juego de palabras con las mismas letras de su nombre completo).

En 1983 se consagró candidato por la UCR junto al cordobés Víctor Martínez, tras dejar en el camino a la fórmula encabezada por Fernando de la Rúa. El 30 de octubre de ese año fue elegido presidente de todos los argentinos, al vencer al candidato justicialista Ítalo Luder. Durante la campaña electoral recorrió todo el país, seduciendo al electorado con sus discursos llenos de esperanza y coherencia. Además de recordarnos a todos el preámbulo de la Constitución, que afirma cuál es el espíritu de la carta magna de la nación, dejó frases para el recuerdo, como la famosa: “Un médico a la derecha”, que reflejaba cómo el gran líder estaba en todos los detalles, incluso observando si había alguien que se descompensaba entre las multitudes que acudían a sus actos. Otra frase histórica de su autoría fue: “Con la democracia se come, se cura y se educa”.

Ya en ejercicio de la presidencia, creó la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep), que se encargó de investigar las aberraciones cometidas por los militares que usurparon el poder desde 1976 hasta 1983, cuyo resultado más emblemático es el libro Nunca Más. De eso se valió para promover el histórico juicio a las juntas militares por sus continuas violaciones a los Derechos Humanos.

Debió padecer catorce paros generales y dos alzamientos militares, además de un sabotaje económico-financiero por parte de grandes industriales y de miembros de la oposición. Luego de dejar el poder, siguió siendo el líder indiscutido del radicalismo, y luchó hasta su muerte por una nación en la que debería primar el diálogo por sobre las diferencias, y en la que no debería haber soberbia ni mezquindades de ningún tipo.

Raúl Alfonsín dejó un legado imborrable que todos deberían seguir: el legado de la honestidad, del compromiso, de la humildad, de la inclusión, de la justicia, de la equidad. Por todas sus virtudes, siempre se lo extrañará.



Diario Inédito· Política

sábado, 31 de marzo de 2012

RAÙL ALFONSÌN: "BASTA DE HOMENAJES. .. CONDUCTA!!!!!!"


Hace tres años ese hombre nos dejò para siempre.
Hace tres años ese hombre y su ejemplo se quedaron para siempre.
La contradicciòn interna que sentimos muchos puede ser asì expresada.
El dolor de hace tres años se ha transformado en ese extrañar a alguien muy querido, pero verlo y oirlo ante las circunstancias que vive el país.
Raùl Alfonsìn hablò para su tiempo pero, cual profeta antiguotestamentario, sus expresiones trascienden su tiempo y hasta parecen anunciar lo que vendrà. Eso se llama: ESTADISTA.
Ese hombre fue portador de gran parte de la Esperanza de un pueblo.
Ese hombre tuvo muchos logros (algunos reconocidos pòstumamente) y otras frustraciones. La Democracia, por èl fundada, aùn tiene asignaturas pendientes. Ha tenido avances y retrocesos. Como a èl le gustaba decir: "La Democracia ha avanzado el ùltimo cuarto de siglo. Pero no ha sido un avance lineal, sino al estilo serrucho".
Esperanzas, logros, frustraciones. Raùl Alfonsìn es como la Vida misma. Por eso lo queremos tanto y lo valoramos cada dìa.
Tuvimos una estrella mundial en el fùtbol que se llamò Diego Maradona. Un cuarto de siglo màs tarde apareciò la genialidad de Messi.
Esta torpe comparaciòn futbolera no hace màs que reivindicar la figura de un lìder aùn no emulado y, menos, superado. Han pasado treinta años de Democracia. Aùn no apareciò otro lìder como Don Raùl. Pero, creemos, aparecerà y serà radical.
Se fue Alem pero siguiò Hipòlito Yrigoyen. Vinieron Arturo Illia y Ricardo Balbìn. Luego, arribò, Alfonsìn. En el medio, muchìsimos dirigentes de lujo.
Esa siembra darà su fruto. Otro, aparecerà. El tiempo.. nadie lo sabe. En un siglo no aparecen màs que dos o tres hombres de esa calidad polìtica.
Pero esa es la Luz que ilumina el camino de la Patria. La Luz que ilumina a la Uniòn Cìvica Radical. Esa Luz no se apaga, pero a veces decae. Es la ANTORCHA RADICAL, perenne. Hay que reavivar esa pasiòn y ese fuego històrico, como lo hizo Alfonsìn.
Èl era humilde y, pienso, los homenajes y los endiosamientos le deben resultar ajenos y hasta molestos. Màs cuando, en su propio partido, hay excelentes dirigentes y militantes pero tambièn gran parte de sinvergûenzas que se llenan la boca con los valores pero, al mismo tiempo, los bolsillos inescrupulosamente, sin perturbarse al cometer fraudes y trampas. Pobre RAÙL ALFONSÌN!!!
Pero su lucha no fue en vano. Muchos llevan esa Antorcha. Muchos no se venden, ni venden al partido. Esos deben ser las puntas de lanza del partido grande, de la intransigencia y los valores no negociables.
Allì volveremos a ser grandes.
Allì, desde el màrmol, Raùl sonreirà.
"No es sepulcro el sepulcro sino templo A los que mueren dándonos ejemplo" José Marmol


Hugo Turrini

jueves, 29 de marzo de 2012

DERROCAMIENTO DEL PRESIDENTE FRONDIZI


El Comité Nacional de la UCR recuerda el 50 aniversario del golpe de estado que, el 29 de marzo de 1962, derrocó al gobierno constitucional de Arturo Frondizi. Las difrencias de ese entonces, acertadas o no, fueron muestra cabal de la fragilidad de los entendimientos necesarios para que cualquier gobierno, sea del signo político al que perteneciera, pudiera finalizar su gestión y traspasar la conducción a otro, dando continuidad a la democracia. Hechos similares contribuyeron al derrocamiento de Arturo Illia en 1966 y al golpe de estado de 1976, que sumergió a nuestro país en los años más oscuros de su historia. Estas interrupciones institucionales reiteradas retrasaron nuestro desarrollo y nos llevaron a la violencia irracional y aún hoy no pudimos cerrar las heridas que provocaron. Por todo ello, en este aniversario de la interrupción del gobierno de un Presidente radical, desde la UCR queremos confirmar nuestro inclaudicable compromiso por el respeto de las instituciones democráticas, que se enriquecen con el debate y la discusión, pero nunca con las divisiones y el enfrentamiento. Buenos Aires, 28 de marzo de 2012 Oficina de Prensa – Comité Nacional de la Unión Cívica Radical Teléfono Directo 4124-8420 prensa@ucr.org.ar // www.ucr.org.ar

sábado, 25 de febrero de 2012

"TODO QUEDÓ ATRÁS, MENOS EL SUEÑO"


El 23 de febrero de 1962, hablando en una tribuna a obreros de frigoríficos de Berisso, moría de un ataque fulminante Crisólogo Larralde. Había consagrado su vida a la causa popular, abrazando el radicalismo de muy joven tras un fugaz enamoramiento del ideario libertario anarquista. En los años treinta enfrentó con fiereza el fraude conservador en su provincia de Buenos Aires y, electo senador provincial en comicios viciados, renunció a su banca como supremo gesto de altivez y moral cívica, rechazando beneficiarse con un cargo a expensas de la tergiversación de la voluntad popular. Murió entre obreros, a los que había dedicado sus mejores horas, sus más lúcidos esfuerzos y pensamientos. "Todo quedó atrás, menos el sueño. mi viejo, ni joven, mi niño. sueño igualitario, libertario. fraternal...He peleado por tantos que lo ignoran", escribió casi como un testamento. Los trabajadores eran "sus hermanos". Así los calificó en un poema que reflejaba su propia visión del 17 de octubre de 1945, cuando los vio pasar con rumbo a la construcción de una nueva fuerza política que centraba su fortaleza en la integración de la clase obrera organizada. Sin embargo, nunca mudó de tienda política. No conoció la especulación ni la traición. Vivió y murió "radical" a secas. Enfrentó al peronismo sin hacer gorilismo, cuestionando y denunciando aquello que tenía de autoritario y antidemocrático, incluso diferenciándose por izquierda, pero cuidando de no agredir a los sectores populares peronistas ni cuestionando las justas conquistas sociales por las que él mismo había derramado sudor y lágrimas. En aquellos años difíciles, esquivos para el radicalismo su presencia, su voz y su pensamiento eran ciertamente orientadores para miles de argentinos, radicales o no. Tuvo otro renunciamiento, olvidado tal vez injustamente. Supo resignar una candidatura a diputado nacional a salir en firme prefiriendo presentar a la UCR como candidato a intendente de su ciudad, Avellaneda, "para que el partido pueda obtener quinientos votos más". Luego fue candidato a gobernador y a vicepresidente de la Nación y en ambas oportunidades obtuvo más votos que los que lograba su partido. Larralde tenía electores propios por fuera del radicalismo, por izquierda sobre todo, por su firme identificación con principios muy caros del socialismo. Pero también - y esto lo sabía Perón - tenía votos peronistas. Larralde fue el numen y garante de la inclusión de los derechos de los trabajadores, los gremios y la seguridad social en la reforma constitucional de 1957 mediante la incorporación del artículo 14 nuevo, incorporando así definitivamente a la República Argentina a la corriente del constitucionalismo social de posguerra. El relato de muchos amigos que integraron aquella Convención Constituyente lo recordaba sentado en la última fila de asientos del paraninfo de la Universidad del Litoral, sede de las sesiones, "marcando" de cerca a los convencionales de modo que ninguno frustrara aquella insigne conquista legal de los trabajadores. La división de la UCR rasgó profundamente su corazón, Crisólogo era respetado y querido en ambos sectores, pero él se quedó y fue piedra angular en la UCR del Pueblo, cuyo primer Comité Nacional presidió. En 1962, cuando fue nuevamente candidato a gobernador bonaerense, el peronismo proscripto hasta entonces, había sido habilitado a participar bajo la denominación de Unión Popular con su candidato Andrés Framini, gremialista combativo. Pero su jefe en el exilio sabía que la candidatura de Larralde era atractiva para vastos sectores de su movimiento que no comulgaban con la candidatura de Framini. La candidatura de Larralde abría una importante posibilidad que el peronismo perdiera la gobernación de Buenos Aires, ya que obtendría votos peronistas. Allí residía también la clave de la estabilidad del presidente Frondizi, jaqueado en su débil estabilidad por su enemistad con todos los actores del proceso político, pero que tenía por don Crisólogo respeto y estima sinceros. Su inesperada muerte en aquel acto de campaña le trajo a la República más dolores y acentuó el trágico sino que se cernía sobre ella. Haciendo un ejercicio de ucronía, el triunfo de Larralde en la provincia de Buenos Aires hubiese apuntalado la endeble institucionalidad, neutralizando la preminencia militar en las decisiones nacionales y canalizando de modo orgánico y pacífico la reinserción del peronismo en el sistema democrático. No pudo ser, y los costos de aquella tragedia están a la vista. Larralde fue ante todo un espíritu inquieto, una mente elevada, una personalidad rectora. Nadie en la República Argentina desconocía su serenidad, claridad de juicio y honradez proverbial, reconociéndole un rol primordial en el escenario político argentino, cuya desaparición provocó un vacío que nunca pudo ser llenado. Tan singular e irrepetible fue su personalidad. Su magnífica sencillez se complementaba con una inteligencia cultivada y un rico estilo literario que le permitió legarnos piezas únicas de filosofía y doctrina política de alta escuela. Algunos de sus pensamientos tienen una notoria actualidad y conviene mantenerlos como norte en la cotidiana labor de quienes abrazan la vocación de servicio a través de la militancia política. Uno de ellos muy especialmente: "en el desprecio de todo poder, está todo el poder".

DIEGO BAROVERO *

(Publicado en el diario "La Prensa" edición del 24 de febrero de 2012) *Historiador. Vicepresidente del Instituto Nacional Yrigoyeneano. Autor del libro "UCR. Su historia, su doctrina, sus nombres"


http://diego-barovero.blogspot.com/

UN TIEMPO DE LIDERAZGOS DORMIDOS




Uno de los componentes que suele destacarse en la prolongada crisis del sistema político argentino es la ausencia de liderazgos fuertes. A los que asoman y prometen se les siente pronto aroma a "flores de un día". Y no es que la gente no tenga preferencias: hay, por cierto, favoritas y favoritos. Pero falta la cristalización del carisma. Y el carisma, a la par de adhesión a proyectos, se teje con vigorosas afectividades. Suena patético, pero tenemos en esto una crisis de amor.
Los racionalistas a ultranza estarán contentos; nos dirán: ¡mejor así, construyamos la nueva política sólo con ideas y capacidades! Como siempre, muestran una visión mutilada de la naturaleza humana, hecha de verdades parciales. Ignoran el peso y la perdurabilidad del motor emocional en la vida pública. Y esto no parece ser asunto de evolución histórica: poco cambiaron las cosas al respecto en dos milenios y medio, de los griegos a nosotros.
Tampoco parece depender de un agotamiento en la nación de personas con condiciones para protagonizar un liderazgo estelar. Esa fuente no se agota, sólo que no fluye siempre. Me contaba un amigo estudioso de nuestra realidad política que, preguntada aquella misma gente que tiene por cierto simpatías políticas actuales, sobre ejemplos de liderazgo contemporáneo entre nosotros, mencionaban sólo dos nombres: Juan Perón y Raúl Alfonsín, ambos desaparecidos. ¿Por qué a casi nadie se le ocurre un líder vivo? ¿Por qué la fuente no fluye siempre?
Ensayemos una hipótesis, virtuosa sólo por contra demagógica: el problema principal somos nosotros, el pueblo. ¡Chocolate por la noticia!, me dirán; se parece a lo que dicen, denostando a la sociedad a la que pertenecen, los mozos de café, los taxistas, muchos profesores y dirigentes corporativos, no pocos políticos opositores, destacadamente el oficialismo; sólo que siempre el problema son determinados sectores de "los otros", nunca "nosotros".
La relación entre líder y pueblo es muy sutil. El liderazgo se construye a través de la intuición que tiene un dirigente de las expectativas dominantes de un pueblo en un momento dado, y aunque ellas estén aún difuminadas y soterradas, o más precisamente cuando lo están. Y no necesariamente aquellas expectativas son de las que calificaríamos como "buenas": quizá los alemanes de los años 30 tenían una necesidad contenida e intensa de autoritarismo y delirio que Hitler supo percibir y orientar. El líder es frecuentemente el partero de expectativas, las explicita y las profundiza. Es una relación de teatro: el autor son las ideas, las emociones; el actor o la actriz, los mediadores e intérpretes, en este caso el o la líder, sólo que aquí el pueblo es autor y público al mismo tiempo. O para completar la metáfora inicial: la crisis de amor surge de una crisis de fecundidad del pueblo, y no puede haber mediador sin nada que mediar.
Perón fue líder porque expresó y estimuló la necesidad de reconocimiento que tenían vastos y postergados sectores sociales. Alfonsín, por expresar y estimular la necesidad de construir una convivencia democrática sentida por los argentinos. En ambos casos hubo un click de sintonía perdurable entre pueblo y líder, quizás menos audible en el fragor de la coyuntura. Y es por eso que muchos de los que no lo quisimos a Perón hoy se lo reconocemos, como tantos que se opusieron a Alfonsín se conmovieron con su muerte.
La inspiración del liderazgo viene del pueblo, para bien o para mal, y es el pueblo hoy el que aparece silencioso, sin demanda profunda. La aspiración a crecer y consumir no alcanza para alimentar ninguna inspiración. Los líderes no son demiurgos. Los que pretenden llegar a serlo ensayan entre nosotros mensajes convocantes: la fibra de la moral pública algunos, el discurso de la eficiencia otros, las instituciones republicanas aquellos, la justicia social en serio pocos, y hasta la partitura del resentimiento no tan pocos. Pero el click no se produce. Tierra yerma por falta de semilla.
Quizás salimos de un sueño frustrado de grandeza y el fracaso aún no tolera la vigilia de la realidad. Pero seguro que hay liderazgos dormidos en espera de pueblo que los despierte y les señale el rumbo. Y no hace falta mucho cuando se produce, porque la propagación de su efecto es como la de la gripe.
Cristina y su grupo son de alguna manera conscientes de esta necesidad. De ahí el relato épico, el intento de construcción del mito Néstor, el adjudicarse todos los méritos de la bonanza económica, la invención incesante del "enemigo". Pero está claro que no basta, aunque pueda bastar para ganar elecciones. El pueblo no le dio "la causa", sólo le pidió que lo sacara del marasmo del 2001-2; tenemos, pueblo y Gobierno, causas provisionales, como prestadas. Pero es la autenticidad de la gran causa la que alimenta la fuerza y perdurabilidad del liderazgo. Por eso el de Perón resiste a su propio autoritarismo y a los menos felices segundo y tercer gobiernos, y el de Alfonsín supera la recesión de los 80 y la hiperinflación.
Esta no es la teoría de que "somos todos responsables", lo cual se parece a ninguno. Gaetano Mosca sostenía que en todo sistema nacional hay una clase gobernante y otra gobernada. Otros estudiosos objetan la idea. Pero en todo caso, no cabe duda de que existen responsabilidades diferenciales. El sistema político argentino -oficialismo y oposición- hoy le dice a la gente principalmente lo que cree que la gente quiere escuchar; pero su obligación moral es plantear en la discusión pública los dilemas difíciles de futuro, las contradicciones y desigualdad de nuestra sociedad, y no esperar a que hechos ingratos los tiren a nuestros pies.
Estamos cristalizando una división de nosotros como pueblo entre una ciudadanía de primera clase y otra de segunda; y esto en los planos político, social y económico. Las instituciones de la sociedad -servicios educativos y de salud, modalidades legisladas de empleo, planes de urbanización, sistemas de protección social, órganos de estímulo empresario- acompañan y profundizan esta dualidad. La cohesión social se relaja, la debilidad del proyecto común se acentúa y crecen los resentimientos y la violencia. Mejoramos todos al salir de la crisis de hace diez años, y esa es nuestra coartada para no mirar la realidad. Inconscientemente, nos preparamos para futuras dificultades anticipando a quiénes haremos culpables. Ni un liberalismo extremo de mercado, ni el actual populismo con cosmética socialista, nos sirvieron para revertir esta tendencia. Como sólo los demagogos pretenden tener fórmulas salvadoras, éste es un desafío para la política; ciudadanos y sistema político, como en la vieja Grecia.
Una discusión así es confusa y contradictoria, en ocasiones disparatada, pero también, tarde o temprano, creativa y esclarecedora. El sistema político y el Estado difícilmente avanzan en iniciativas de reforma que no lleguen arropadas por la inquietud popular. Y es en aquella discusión donde se gesta una oscura conciencia pública, un anhelo mayoritario de otra cosa distinta a lo que tenemos, un salto cultural. Y habrá siempre quien interprete esa conciencia, la transforme en política y la lidere. © La Nacion







ALDO NERI
El autor, médico, fue ministro de Salud y Acción Social (1983-86) y diputado nacional








lunes, 20 de febrero de 2012

Los verdaderos radicales: con Despouy






Esta semana los medios echaron a rodar el "trascendido" de la discusión entre Riquelme y Falcioni. Abarcaron varias horas con la noticia. Sin dudas... algo pasó. Sin embargo, los protagonistas minimizaron la cuestión y, prácticamente, culparon al periodismo de perverso!
En las huestes radicales, no fue muy distinto.
El presidente del Comité Nacional, Mario Barletta quiso realmente "voltear" al titular de la Auditoría General de Gobierno, Leandro Despouy??? Quiso colocar en su lugar a un allegado??? Lo hizo por venganza por alguna denuncia que lo incomodó de parte de Despouy años atrás??
Despouy aceptó renunciar en una reunión y después dijo lo contrario????
O, en realidad, fueron todas fabulaciones y, tal expresa en un comunicado el Comité Nacional: aquí no ha pasado nada????
Cuando el río suena.....
Miles de voces radicales se alzaron en defensa de la continuidad de quien con solvencia y honestidad comandó la auditoría los últimos diez años.
Muchos hicieron llegar su disconformidad a las autoridades partidarias.
Y como lo virtual también crece día a día: mil setescientos miembros de facebook se unieron a un grupo llamado: "Los verdaderos radicales bancamos a Leandro Despouy" , en menos de 48 hs.
Este grupo sirvió para analizar los distintos rumores e informaciones aparecidas en los diarios y medios digitales sobre "el cese de Despouy" y para realzar la figura de un funcionario que en su gestión llevó adelante dos mil denuncias. Un hombre incorruptible y con un fenomenal curriculum nacional e internacional relacionado con el Derecho y los Derechos Humanos.
La gestión llevada a cabo hacía impensable cambiar al auditor, que no solo tiene el visto bueno de los radicales sino de los principales dirigentes de la oposición. Sería como cambiar un equipo de fútbol que juega bien y gana todo.
El grupo, formado en facebook por el dirigente sanmartinense Raúl Rodolfo Rodríguez (ex-candidato a consejero escolar UCR en las últimas elecciones por su distrito) fue criticado por su título de "Verdaderos radicales", lo cual, por distintas motivaciones internas que desconocemos, ofendieron a algunas personas. Se intentó mutar el nombre y poner solo "Los radicales bancamos a Despouy", pero el vertiginoso crecimiento impidió ese cambio puesto que pasando la membresía de cien personas ello se torna tecnológicamente imposible.
Nos alegramos por la continuidad de Don Leandro Despouy. Nos prestigia a todos.
Algún dirigente manifestó que el presidente Barletta (aquel hombre flojo de papeles , según la definición de un conocido lider de un sector interno, que llegó a la conducción partidaria por un acuerdo de voluntades, sin , supuestamente,la experiencia comiteril necesaria) se estaría manejando como un "elefante en un bazar".. Creo que de ahora en más el correligionario Barletta quitará todo lo que sea de cristal!!!!
Más allá de esta pequeña broma, considero que el señor Barletta ha cometido algunos errores (indudablemente por su falta de experiencia) en poco tiempo de gestión y, seguramente, aprenderá a través de un curso acelerado de gestión partidaria radical.. en la práctica.
Por supuesto que esta situación no puede generar ningún "clima destituyente" partidario. Si alguno lo quiere utilizar para proseguir la eterna interna.. le pedimos que no lo haga. Nos haría mucho daño.
Barletta fue un excelente intendente, de una gestión impecable, que nos prestigia a todos los radicales.
Debemos respetar esa autoridad y colaborar constructivamente para que no cometa errores. Respeto a la autoridad pero exigencia de las bases de lo que creemos que está mal, no para destruir a nadie sino para el bien de todos. Con la sincera colaboración de todos los radicales, mejorará su gestión y se olvidarán esos errores cometidos. Es inteligente y es un buen radical.
Sigue Despouy para el bien del pais y del partido.
Y que el amigo Barletta también siga y cuando termine su gestión digamos: "puso al radicalismo nuevamente de pie para luchar por la Presidencia de la Nación". Es un anhelo . Es posible. Depende de nosotros.
Hugo Turrini

miércoles, 18 de enero de 2012

ILLIA Y LA CARTA DE LA DISCORDIA. CENSURA????



EN MI CARACTER DE MILITANTE, DIRIGENTE Y PRESIDENTE DEL MOVIMIENTO ARTURO ILLIA EN NOMBRE Y EN REPRESENTACIÓN DE MILES Y MILES DE DEVOTOS DE DON ARTURO, RADICALES Y NO RADICALES; VENIMOS A RENDIRLE UN PROFUNDO, SINCERO, SENTIDO Y MAS QUE MERECIDO HOMENAJE EN UN ANIVERSARIO MAS DE SU MUERTE; AL HOMBRE QUE SE HA CONVERTIDO EN EL "ALMA DE LA REPÚBLICA" AL TRANSFORMARSE EN EL ARQUETIPO DE LA PAZ, DE LA VERDAD Y DE LA LUCHA INQUEBRANTABLE EN LA DEFENSA DE LOS INTERESES NACIONALES Y POPULARES, EXPULSANDO DESDE SU EJEMPLO A LOS FARISEOS DE LA CORRUPCIÓN Y ENTREGA DEL PATRIMONIO NACIONAL, SIN NEGOCIAR DURANTE TODA SU VIDA CON LOS "MERCADERES" DE LA POLÍTICA.HOY, MAS QUE NUNCA SU EJEMPLO ES UNA FUENTE INAGOTABLE DE CONOCIMIENTO DE LOS VALORES TRASCENDENTES E INMORTALES DE LA UCR, COMO UN APORTE A LA DIGNIDAD DEL HOMBRE, EL RESPETO A LAS INSTITUCIONES Y A LA GRANDEZA DE NUESTRO PUEBLO. SIGAMOS SUS IDEAS Y CONCRETEMOS SUS SUEÑOS SIN PACTOS ESPUREOS QUE DENIGRAN Y CONFUNDEN A NUESTROS CORRELIGIONARIOS Y A NUESTROS COMPATRIOTAS, SIN MITOS, RENUNCIAMIENTOS,CLAUDICACIONES, UNICATOS, NI IMPRESCINDIBLES. A SEGUIR LA LUCHA HASTA CONCRETAR NUESTRA VICTORIA

DR LEANDRO HIPOLITO ILLIA
PRESIDENTE MOVIMIENTO ARTURO ILLIA








El cierre de los discursos en La Recoleta, culminó con un incidente entre los allegados a Leandro Hipólito Illia, hijo del ex presidente, quiénes intentaron detener la ceremonia de ofrendas florales acusando a los organizadores de negarles la posibilidad de leer en el acto un mensaje enviado por el hijo de Illia.
Alfonsín, poco antes de depositar la ofrenda de la UCR en la tumba del líder, fue increpado por los allegados a Leandro Illia, quiénes lo acusaron de "aprovechar el homenaje para hacer un acto proselitista".(Fuente: Infobae)

lunes, 16 de enero de 2012

DON ARTURO, PRESENTE!!!!!


Este miércoles 18 de enero están todos invitados al Cementerio de la Recoleta, donde a partir de las 17:30hs se evocará a la figura del Presidente ARTURO UMBERTO ILLIA , a 29 años de su fallecimiento.
Hablará Ricardo Alfonsín.
Los esperamos!!!!
ADHIERE MOVIMIENTO "ANTORCHA RADICAL".
Hugo Turrini

viernes, 13 de enero de 2012

LAS OPCIONES RADICALES


"Debemos confluir con Binner. Es progresista como nosotros" se escucha en un extremo del campamento. "No, el camino es con Macri. Si no recuperamos la base electoral porteña, no hay posibilidad alguna de disputar el poder nacional al peronismo", contestan otros.

Así las cosas, daría la impresión que el radicalismo sólo tuviera como alternativas servir de rueda de auxilio a opciones extrañas, sin ningún papel propio que cumplir en la política argentina.

Sin embargo, convertirse en el ala derecha de una alianza con los socialistas y sus aliados o en el ala izquierda de una alianza con el Pro y los suyos, no pareciera ayudar al principal problema de la Argentina, que es recuperar la vigencia de la democracia republicana plena y colocar nuevamente al país en el camino constitucional, "representativo, republicano y federal".

La división opositora por veleidades ideológicas no sólo garantiza la continuidad del populismo -que ha demostrado su capacidad para contener a todos sus matices-, sino que enfrentaría la demanda que la gran mayoría de los votantes opositores le pide a sus dirigencias: capacidad para hacer lo propio, en base a la elaboración de un programa para la etapa que contenga la seriedad de la gestión económica para retomar el camino de un crecimiento con pilares sólidos, con políticas de inclusión social que reemplace el clientelismo por la construcción de ciudadanía.

No hay ningún tema " programático" indispensable para salir del atolladero en el que nos metió el kirchnerismo que no permita una respuesta sensata unificada desde el campo democrático republicano. Y ese es, justamente, el tercer camino que tiene frente a sí el radicalismo.

Amucharse detrás de Binner, de Macri o de ambos, puede ayudar a resguardar pequeños espacios de poder, de unos u otros. Sin embargo, no aportará nada al destino argentino, como no sea la íntima satisfacción del peronismo. Fijarse la tarea de la construcción del gran espacio democrático-republicano alternativo lo ubicaría en la senda de su papel histórico, que ni uno ni otro está en condiciones de lograr por sí.

Ni la derecha de los socialistas, ni la izquierda del Pro. El papel que haría honor a su historia y a lo que los ciudadanos esperan del viejo partido es armar la alternativa con vocación de poder. Asumirse como nodo articulador del pensamiento democrático y republicano, con todos sus matices. Promover el acercamiento político y la elaboración programática. Imaginar la ingeniería política de una confluencia que tiene que contener a todos respetando la representatividad de cada uno.

Esta tarea deberá ayudar a establecer las pautas de las consultas electorales abiertas en todas las jurisdicciones a las que será imprescindible recurrir sin trampas leguleyas u oportunistas para que esa construcción tenga en todas sus etapas plena legitimidad ciudadana. Y si fuera posible, ayudar a generar liderazgos propios en condiciones de disputar lealmente en esas internas abiertas no sólo con Binner y Macri en las candidaturas mayores, sino en los diferentes niveles de representación, en todos los distritos.

El objetivo es ambicioso. Tal vez. Los otros lo son menos. Sin embargo, también es probable que conduzcan a la fragmentación final del viejo partido, y a su desaparición ante su inutilidad política frente a las necesidades ciudadanas de la hora.

Ricardo Lafferriere


.