Como muchos argentinos tenemos dudas y certezas sobre el dia despues y el porvenir. No dudamos sobre la firmeza y capacidad de Cristina Kirchner para ejercer la Primera Magistratura,ya lo ha demostrado,aunque no coincidamos con modos, métodos y algunos objetivos. La inesperada ausencia del Ex-Presidente Néstor Kirchner, su esposo y líder del proyecto político que ambos construyeron,puede generar turbulencias. Ella aún no es su lidereza. Es una obligación para el Justicialismo en todas sus variantes,procesar y resolver con serenidad, seriedad, paz y generosidad con el país, el camino que seguirán en adelante, sabiendo que las decisiones internas del sector impactarán en la vida de todos. Seguramente muchos peronistas aspiran, como nosotros, y entre otros temas, a que se abra el diálogo para escuchar otras opiniones sin maltratar la libertad de expresarlas, se encuentren los consensos en el Parlamento y se respeten sus Leyes, se cumplan las sentencias de la Corte, se mejore en todo el mundo la imagen, ya consolidada en nuestra América del Sur, proceso iniciado por el Mercosur allá por 1985. Es lo que espera la mayoría de la gente. No depende de nosotros. Nosotros por doctrina y convicciones democráticas y populares hemos sido,somos y seremos la oposición más firme y constructiva hasta el 2011, cumpliendo el mandato y el mensaje de la urnas. Afianzar y mejorar la Institucionalidad,achicar la brecha entre poderosos y débiles proponiendo medidas más claras y eficientes en la lucha contra la dictadura de la pobreza y la mortalidad infantil,mantener el crecimiento economico y realizar el indispensable desarrollo social, reconstruir un Estado presente en la educacion, la salud publica y la seguridad. Sincerar la información oficial sobre aspectos centrales que insiden en nuestra vida diaria y la proyección de un futuro posible. El más contundente apoyo a la Presidente para apuntalarla, es ofrecer al País nuestra alternativa y proyecto de País con seriedad y decencia y siempre dispuestos a ser oídos. Hace 27 años comenzamos el aprendizaje de convivir en las diferencias,escuchar y atender al que discrepa, persuadir más que imponer ideas. Aprendimos que en los momentos aciagos y ante la necesidad de superar escollos, tenemos que recurrir a las ideas fundamentales con mesura y equilibrio, sin fundamentalismos para converger en las respuestas que el país demanda. Así lo hizo el Padre de la Democracia. Es su legado, es nuestro deber. Lo cumpliremos.
TOMÁS BRES
Ex-Secretario de Turismo
de RAÚL ALFONSÍN
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